¿Cómo ha evolucionado el precio de la biomasa y cuáles son las perspectivas de futuro?

La astilla de madera tiene un coste medio en torno a 100 €/tm, equivalente, a igualdad de capacidad calorífica,  a que el gasoil costara 25 céntimos de euro. El pellet a 200 €/tm equivale al gasoil a 40 céntimos de euro.

La oscilación del precio de astilla y pellet los últimos años ha sido pequeña. No ha ocurrido lo mismo con los combustibles fósiles, el barril de petróleo ha oscilado los últimos años entre 28 y 150 dólares.

Es previsible que se implante un impuesto ambiental, tasa de carbono, a los combustibles fósiles para lograr las metas europeas en la lucha contra el cambio climático.

La ventaja económica principal de la biomasa sobre el gas natural o el gasóleo, y mucho más respecto a los gases licuados del petróleo o la electricidad, radica en el menor coste del combustible y en una mayor estabilidad del precio de éste, al no depender de los precios del petróleo. Esta ventaja tiene que equilibrar y prevalecer frente al mayor coste de inversión inicial que supone instalar un sistema de biomasa que su equivalente de gas o gasóleo.

Según distintos estudios del Ministerio de Energía, la biomasa, en su versión de menor inversión inicial, se hace plenamente competitiva con el gas natural a partir del 4º año. Sin embargo, la vida útil de un sistema de calefacción se estima en un mínimo de 15 a 20 años. Por tanto, la decisión habría que tomarla por sus efectos a largo plazo. En ese caso, la biomasa y el gas natural acumulan costes de forma similar hasta el año 7, momento en que el menor coste de la biomasa invierte la situación, haciéndose la opción más barata de ahí en adelante.

2017-08-23T06:16:08+00:00